Sexo y maratón

Este fin de semana hay media maratón y quiero hacerlo bien y siempre me da la duda sexo sí o sexo no antes de competir.
Alguien dice que tengo que aprender a besar y claro si me enseñan a besar una cosa lleva a la otra y al final a saber que pasa y el domingo corro que hago?
Bueno pego el articulito debajo:

hacer el amor nos pone en forma, tal vez sea por culpa del más forzudo de los héroes griegos quien, según señala la leyenda, era capaz de desflorar a más
de 50 vírgenes en una sola noche.

Por desgracia el mundo de los dioses y héroes está muy lejos de nuestra cotidiana existencia, donde llegar a trabajar a la hora o sacar un momento para
hacer la compra lo condicionan todo. Aunque las preguntas permanecen ¿Nos pone en forma hacer el amor? ¿A qué equivale un orgasmo en términos deportivos?
¿Puedo acostarme con alguien antes de correr? ¿A qué equivale en términos deportivos hacer el amor? ¿Puedo eyacular antes de correr?

Hay opiniones para todos los gustos. Según algunos, el sexo tiene que estar lo más alejado posible del deporte, tanto del entrenamiento como de la competición.
Otros consideran que es un estímulo muy beneficioso para los resultados deportivos. Cuando nació la gimnasia, su inventor, Friedrich Lidwig Jahnn, estaba
convencido de que el ejercicio que propugnaba iba a ser la mejor receta para acabar con el desenfreno sexual que, según su pacata percepción, existía en
los albores del siglo XIX. Los científicos y los propios deportistas han demostrado lo contrario. Con buena forma física se tienen más ganas de sexo.

La cosa tiene una explicación científica. La actividad física estimula la producción de endorfinas, hormonas que influyen en el sistema nervioso central
se unen a los receptores nerviosos de una manera similar a como lo hacen los compuestos opiáceos. De esta manera, intervienen en la sinapsis (la reacción
que enlaza las neuronas entre sí y logra transmitir los impulsos nerviosos) originando un efecto analgésico, que atenúa el dolor, y placentero. Cuanta
mayor cantidad de endorfinas viaje por la sangre, más aumentará la actividad física. Algo que conocen bien quienes practican deportes de resistencia, como
el maratón, y existen bastantes testimonios de deportistas que aseguran vivir una euforia inusual en ciertas sesiones de entrenamiento o competición, en
las que se sienten con una sensibilidad 'por encima de lo normal'.

Una experiencia realizada en la Universidad californiana de San Diego, certifica tal mejoría. Dirigida por el doctor Jim White sobre 115 varones mayores
de 15 años, sometió a estos a una sesión diaria de carrera de 20 minutos durante 15 días. Todos ellos aseguraron que su apetito sexual había aumentado,
llegando algunos a duplicar su actividad sexual anterior al experimento.

Aunque, atención, si nos pasamos se producirá el efecto contrario. Diferentes estudios realizados sobre corredores de maratón han constatado que aquellos
que sobrepasan los 64 kiómetros semanales de carrera, aumentan sus niveles de endorfinas pero, por el contrario, se les bajan los de testosterona. Y la
testosterona es el motor sexual, la hormona que controla el impulso del sexo, entre otras funciones, como la agresividad que se necesita para derrotar
a un adversario o, simplemente, ir algo más allá de nuestros límites deportivos. Si consumimos ese combustible en metas deportivas, luego a la hora de
llegar a la cama, pues eso, nos quedamos dormidos.

En definitiva, está constatado es que una buena condición física estimula el deseo y los impulsos sexuales. Aunque, eso sí, sin pasarse. Algo que es de
sentido común. Si no estamos sanos, la líbido se nos cae bajo cero, pero cuanto mejor sea nuestra mejor forma, mayor serán la capacidad de reacción, la
resistencia y la sensibilidad de nuestro organismo. O sea, más intensidad tendremos en nuestra actividad sexual. Así que, amigos, ¡a la cama! Oh, perdón:
¡a entrenar!

Si al pasarte de 64 Km te baja la lívido cuando deje el maratón y me ponga a correr populares me tocará buscar una ninfómana jajajajajajjajajajajaja.
Por otro lado no podré dejar de entrenar nunca que lo que uno tiene no se puede desaprovechar, este si que es un buen estímulo para hacer buenos entrenamientos ni apoyo económico ni apoyo en material deportivo ni metas ni chorradas o entrenas o se te levanta menos esa si que es una gran razón para entrenar.
Ya me contais el que entrene como le va y el que no entrene ya sabe a entrenar, más kilómetros menos viagra.